Dentro de la categoría de los juegos de terror, aquellos que se ven en primera persona suelen ser los más inquietantes. No poder ver qué nos acecha a nuestras espaldas, o encontrarnos de golpe como algo indeseable al abrir una puerta o dar la vuelta por un pasillo, son sensaciones perturbadoras pero satisfactorias para quien guste de este tipo de juegos, como en mi caso. CHARON’S STAIRCASE, el más nuevo título de Indigo Studios, nos mete de lleno en una atmósfera opresiva, dónde lo desconocido nos respira en la nuca a cada paso.
CHARON’S STAIRCASE se encuentra disponible para Playstation 4, Playstation 5, Xbox One, Xbox Series, Nintendo Switch y PC.
¿QUIÉN NOS MANDÓ A METERNOS ACÁ?
Por supuesto, las cosas no van a tardar en complicarse, y lo que en principio parecía un pequeño recorrido por una vieja casona abandonada pronto se va a convertir en un descenso a lo más profundo del infierno mismo.
La historia nos pone en el papel de Desmond, un investigador privado que fue contratado por el Ministerio de un país ficticio para adentrarse en un territorio conocido como Oack Grove, y con la misión de recuperar cierta documentación con información sensible. Resulta que en dicho territorio corre el rumor de que un tal doctor Lewelin llevó a cabo en su mansión una serie de experimentos un poco…polémicos, digamos. Las prácticas de este señor incluían, entre otras cositas, la eugenesia. Este señor y su equipo realizaban un trabajo con mucho amor por su patria, el cuál consistía en robar o comprar niños a los pobres e ignorantes campesinos de la zona, y realizar en ellos todo tipo de pruebas y vejaciones en pos de un “mejoramiento genético de la raza humana”.
Todos estos sucesos habrían transcurrido muchos años antes del comienzo de la historia del juego, así que ahora los terrenos que rodean la mansión están abandonados y hace mucho tiempo que no se sabe nada del buen doctor ni de sus experimentos. Desmond se infiltrará en Oack Grove en búsqueda de la verdad y con el objetivo de recolectar todas las pruebas que consiga de todos esos hechos aberrantes. Por supuesto, las cosas no van a tardar en complicarse, y lo que en principio parecía un pequeño recorrido por una vieja casona abandonada pronto se va a convertir en un descenso a lo más profundo del infierno mismo.
SUSTOS QUE DAN GUSTO
Todos aquellos que hayan jugado aquellos walking simulators con dosis de suspenso y terror, cómo por ejemplo la saga AMNESIA, enseguida se van a sentir cómodos con lo que CHARON’S STAIRCASE ofrece. Se trata básicamente de una aventura en primera persona, dónde la mayor parte del tiempo nos encontramos recorriendo diferentes locaciones (entre las que se incluyen una enorme mansión, un hospital o una planta nuclear), al tiempo que recogemos documentos, interactuamos con objetos y resolvemos puzzles.
Al tratarse de una suerte de historia interactiva, Desmond no maneja ningún tipo de arma, no hay medidores de energía ni de vida. De hecho, y salvo algún que otro sector que tenga un puzzle mortal, no hay realmente algo que nos haga “perder” el juego, y mientras vayamos encontrando los ítems o soluciones que necesitamos, la aventura va de a poco avanzando.
Cómo no podía ser de otra manera, al tratarse de un juego de miedo, el título está lleno de situaciones y jumpscares que nos sobresaltarán el corazón en más de una ocasión. Puertas que se cierran bruscamente detrás nuestro, golpes, figuras que corren por los pasillos, ruidos extraños y apariciones fantasmales, todos están a la orden del día, listos para pegarnos un buen susto cuando más concentrados estemos en nuestra investigación.
La ambientación es siempre opresiva y oscura. Y cuando digo oscura, me refiero a que es realmente OSCURA. El detective no posee una linterna ni ningún tipo de elemento de iluminación, por lo que se me dificultó muchísimo ver por dónde iba o que objetos había a mi alrededor cuando comencé a jugar el juego. No fue hasta que decidí subir el brillo en la configuración del título el momento en que realmente empecé a disfrutar del recorrido y no forzar la vista al extremo para poder ver algo. La diferencia se ve en las capturas adjuntas, las más oscuras y poco visibles son, por supuesto, las tomadas antes de reconfigurar el juego.
Y hablando de puzzles, debo decir que la mayoría son realmente muy, muy difíciles. El juego da realmente pocas pistas para resolver sus acertijos (al menos desde mi punto de vista) y además muchas soluciones son “visuales”. ¿Qué quiero decir con esto? Que a veces para descubrir una combinación para abrir una caja fuerte debemos adivinar que para averiguar uno de los números tenemos que contar las sillas que hay en un comedor, en base a una pista muy vaga que aparece en un texto, y así con cada número de dicha combinación. Otro ejemplo es un puzzle de un piano, dónde debemos tocar las teclas en cierto orden pero para saber ese mismo orden tenemos un código de colores en las teclas mismas, pero a su vez tenemos que determinar el orden leyendo un poema donde determinadas palabras clave hacen referencia a esos colores. Así de complicado como suena, así de complicado es. No es de ninguna manera un juego para impacientes o jugadores que no gusten de exprimirse al límite los sesos. Incluso a veces sentí que era exagerada la dificultad o poca información para resolver los problemas del juego.
SIMPLE Y EFECTIVO
Siempre teniendo en cuenta de que se trata de un juego indie y las limitaciones que eso conlleva, podemos de todas formas decir que CHARON’S STAIRCASE es un título más que decente a nivel técnico. Los gráficos se ven lo suficientemente bonitos, más aún en ambientes cerrados, dónde todo está lleno de muchísimos detalles y se nota realmente el esfuerzo y el amor puesto en la atención. Todas las estructuras y amoblamientos se ven el general muy bien realizados, y destacan muy por encima de los modelos de los personajes, bastante más simplones y sin tanto trabajo encima. Cómo dije más arriba, una de las cosas que más me molestó de entrada fue la excesiva oscuridad de los ambientes, que prácticamente me hacían imposible poder jugar, lo que más tarde solucioné aumentando el brillo al título. Perdí un poco de inmersión y suspenso, seguro, pero la verdad es que de otra manera no podía jugar.
CHARON’S STAIRCASE puede llegar a ser un juego interesante, pero…esa mirada va a depender del tipo de jugador que lo esté jugando. Algunos puzzles me han tomado literalmente horas hasta que adiviné las soluciones. Y digo “adiviné” porque el título no me dio ni las herramientas ni las pistas necesarias para entender su funcionamiento.
El sonido también está muy bien. Los golpes, ruidos, gruñidos y murmullos que nos invaden realmente nos van a poner la piel de gallina. Las melodías también aportan con su cuota de suspenso, que nos mantiene el corazón acelerado toda la partida. En el apartado de las voces, la única que vamos a escuchar es la del mismo Desmond, quien nos va relatando todos sus pensamientos y sentimientos todo el tiempo, lo que le da al juego un toque de novela noir que particularmente me gusta mucho. La actuación de voz está muy bien lograda, sobre todo en español, lo que convierte a CHARON’S STAIRCASE en un paseo muy agradable mientras estamos dentro de la cabeza del investigador.
El punto dónde el juego recae es, lamentablemente, en la jugabilidad. Cómo mencioné, la mayoría de los puzzles me parecieron en extremo rebuscados, con soluciones muy tiradas de los pelos, pistas muy vagas o directamente como situaciones de prueba y error. Una pena que un juego que justamente esté enfocado en ese aspecto no lo tenga lo suficientemente pulido o flexible, al punto de que los jugadores llegamos a sentir de que algún puzzle no tiene realmente sentido, solución lógica o directamente que el juego nos está tomando el pelo.
UN LINDO VIAJECITO, PERO SOLO PARA GENTE CON NERVIOS DE ACERO
En resumidas cuentas, CHARON’S STAIRCASE puede llegar a ser un juego interesante, pero…esa mirada va a depender del tipo de jugador que lo esté jugando. Algunos puzzles me han tomado literalmente horas hasta que adiviné las soluciones. Y digo “adiviné” porque el título no me dio ni las herramientas ni las pistas necesarias para entender su funcionamiento. Si sos un jugador a quien no le importa que eso suceda y estar estancado mucho (mucho) tiempo no lo saca de quicio, el juego termina siendo mínimamente disfrutable.
Los aspectos técnicos son decentes, con una calidad gráfica buena, un apartado sonoro bien realizado y una historia linda y con un par de plot twists que pueden llegar a sorprender.
Incluso hasta tenemos la posibilidad de juntar ciertos coleccionables, que seguramente no consigamos todos en una primer partida, así que si decidimos dar una segunda vuelta vamos a sorprendernos de lo rápido que se avanza una vez conocidas las soluciones de los acertijos.
LO MEJOR
- Un argumento atrapante y bien contado.
- Tecnicamente más que correcto.
- Jumpscares bien colocados
LO PEOR
- Frustrante en extremo en más de una ocasión
- Modelos de personajes no demasiado cuidados
- Imposible de jugar con la configuración de brillo por default.