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Paper Mario: The Thousand-Year Door – Review La revitalización de un gran clásico de RPG

Voy a empezar con un comentario que puede que a más de uno le resulte controversial:

“Paper Mario es mejor RPG que Super Mario RPG”

A mí humilde criterio ambos son buenas herramientas de introducción para los más pequeños al mundo de los videojuegos de rol, pero sólo Paper Mario lo hace de una manera tan dinámica que se torna entretenido también para adultos.

Allá por el año 2004, la primera versión de The Thousand-Year Door (TTYD) hizo su aparición para la queridísima Nintendo Gamecube, siendo la continuación luego del gran debut en Nintendo 64 en el año 2000.

Luego de 20 años, nuestro Mario en 2D vuelve fresco con un remake este pasado 23 de mayo.

La historia sin fin

La historia es la misma, no voy a dar demasiados rodeos; Peach por decimoctava vez es raptada del Reino Champiñón, pero esta vez no por Bowser, sino por una organización llamada Mega X. Su intención es hacerse con algo llamado fragmentos estelares, para así abrir la puerta milenaria y robar un tesoro antiguo.

Obviamente ante esta situación el único diseñado especialmente para lidiar con estas situaciones es nuestro querido fontanero, quien se embarca en una aventura para conseguir todos los fragmentos estelares y salvar a la princesa… otra vez.

TTYD no viene con un cambio demasiado sustancial en la narrativa central de la historia, salvo algunos ajustes de diálogo e idioma.

En cuanto al gameplay, es sabido que estamos hablando de un RPG clásico de principio a fin. A lo largo de la aventura Mario irá sumando amigos a la party y cada uno con diferentes habilidades únicas.

“Paper Mario es mejor RPG que Super Mario RPG”, no hay punto de comparación más allá de que el primero sea la norma entre los fans de la gran N.

La diferencia con su debut del 2000 es que en esta ocasión las batallas ocurren en el escenario de un teatro, con público y escenografía. Podría considerarse que estas dos adiciones a los combates son solamente por mera cuestión estética, pero forman parte de la misma dinámica de batalla; los personajes podrán interactuar con el público en todo momento para poder conseguir estrellas y así poder usar habilidades especiales, en cuanto a la escenografía a veces partes del escenario podrá caerse para hacer daño a los enemigos o hasta a Mario. El resto de las mecánicas se mantienen igual de entretenidas que siempre; en los combates solo habrá lugar para Mario y un acompañante, pero con la posibilidad de intercambiarlos en cualquier momento las veces que sea necesario.

Como es de esperarse y siendo insignia de todos los Paper Mario, cada habilidad de combate tendrá una ejecución específica en cuanto a botones; el timming y las combinaciones son la clave y serán significativamente diferentes entre cada personaje de la party.

Por último y no menos importante, el tema de las insignias por supuesto que sigue vigente. Las insignias sirven para mejorar stats o sumar habilidades nuevas a cada uno de los personajes, pero solo podremos utilizar un número limitado de las mismas y cada una usará una cantidad determinada de puntos de habilidades.

A lo largo de la aventura vamos a ver que no todo se mantuvo igual a la versión original, habrá cambios en algunos diálogos y se sumaron algunos jefes nuevos.

La frutilla del postre

Si nos detenemos específicamente en lo visual de la entrega, que es lo que primero resalta en esta nueva edición, vemos un Paper Mario mucho más limpio, lo cual es de esperarse. Observamos figuras geométricas que se alejan mucho de lo poligonal de su origen, colores mucho más llamativos, contrastados y con una paleta de colores rica. Incluso varios escenarios cuentan con un mayor número de animaciones e interacciones, lo que hace que lo veamos con una mayor sensación de profundidad.

De todas formas, es musicalmente donde veo la mayor porción de evolución. Toda la banda sonora fue recreada desde cero, dando como resultado una versión mucho más fresca. De igual manera sí sos de esos que desea experimentar un atisbo de la época de NGC, podremos conseguir relativamente pronto en el juego una insignia que hará que toda la banda sonora actual pase a la original.

En rasgos generales Paper Mario TTYD funciona de maravilla, nada que no sea el estándar de Nintendo con sus entregas pilar. La diferencia más notoria es que en esta versión los FPS van clavados a 30, no como en su versión original que eran de 60. La realidad es que esta decisión no afecta a la experiencia, pero sí deja que pensar en cuál fue la razón de este cambio. Es verdad que en su momento la Nintendo Gamecube acostumbraba a demostrar su potencia cuando y cuanto podía, así que puede que hoy en día la decisión de los FPS haya quedado rezagada a una cuestión artística con el videojuego en sí, apostando a mejora gráfica y sacrificando fluidez.

LO MEJOR

  • Visual y sonoramente revitalizado
  • Adición de nuevos bosses

LO PEOR

  • No hubo cambio argumental en la historia

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