Hace unos días se lanzó The Last Worker, un juego desarrollado por Oiffy y Wolf & Wood Interactive. Con un elenco de voces muy interesante, una premisa curiosa aunque con un producto final más orientado al VR que al sistema común.
The Last Worker esta disponible para PC, Xbox Series X/S, PS5, PSVR2, Switch y Meta Quest.
Muerte al capitalismo
Hace poquito se anunció la decisión de terminar el servicio de Book Depository, una de las tiendas digitales de libros más grandes del mundo, comprada por Amazon en el 2011. Al margen de que la multimillonaria empresa también ha despedido a miles de personas. Parecierá que la premisa de The Last Worker podría convertirse en realidad.
El juego cuenta la historia de Kurt, el último empleado de una empresa de envio de paquetes conocida como Jüngle (un Amazon del futuro) donde el resto de tus colegas son robots autómatas haciendo su trabajo sin muchas preguntas.
Días, meses y años pasan mientras Kurt envia estos paquetes a la ciudad hundida de Manhattan. Entre la monotonía de cada día entabla una amistad con un pequeño robot Skew. Su vida da un vuelco cuando es contactado por S.P.E.A.R., un grupo de activistas que le piden a Kurt ser su espia en la empresa y revelar los secretos que esconde su CEO.
The Last Worker no presenta un escenario para nada original, es el típico futúro distópico controlado por las grandes multinacionales y un grupo revolucionario intentando detenerlo. Trama que por ejemplo esta en «Brazil» de Terry Gilliam; por nombrar una historia similar.
Estoy en automático
Los juegos de realidad virtual estan creiendo cada vez más en el mercado. Se nota que The Last Worker esta pensado para el VR. Muchas de sus funciones tienen en mente este tipo de tecnología.
Kurt esta a bordo de su JunglePod, una especie de nave o carrito de envios. Nuestra «arma» principal es la JungleGun, una pistola para agarrar paquetes, etiquetarlos y luego con otras funciones que se van destrabando a lo largo del juego. También tenemos un mapa que esta un poco por debajo de nuestra visión (aunque lei que en el VR se puede ver sin problemas). Al principio del juego tendremos que llevar paquetes para enviarlos o etiquetarlos si estan rotos o mal pesados para ser reciclados. Luego se suman las mecánicas de infiltración, donde vamos a tener que escondernos de robots o evitar ciertos lasers o puertas que se cierran.
Vuelvo a insistir que no se como se siente en el VR pero en la versión normal el juego parecierá estar en automático por momentos y en otros no responder bien a nuestros comandos por ejemplo con un turbo que funciona cuando quiere.
Completar el juego no es muy dificil; se acerca más a un walking simulator con prueba y error cuando nos perdemos o no realizamos una acción a tiempo. Lo bueno es que tiene multiples finales y la posibilidad de coleccionar los productos de la empresa.
Una sala interactiva
Si no fuera porque estamos hablando de un juego que cuenta con ciertas funciones y mecánicas (y no necesariamente es un walking simulator) podríamos decir que The Last Worker es una película interactiva. Tiene voces de primer nivel como Jason Isaacs (Harry Potter, The OA, Death of Stalin) y Ólafur Darri Ólafsson (Severance, The Deep). Con una banda sonora creada por Oliver Kraus; que ha trabajado en peliculas como El Gran Gatsby, Buscando a Dory y colaborado con Sia.
En cuanto a lo visual, los personajes estan diseñados por Mick McMahon (Judge Dredd) y cumplen su función. Tienen mucho color y un aspecto visual con un estilo cell shading. Aunque se nota que se puso mucho más trabajo en esto que en los escenarios que pueden parecer todos iguales. También tener en cuenta que el juego esta pensado con gráficos para el VR y no para computadoras o cnsolas de nueva generación.
LO MEJOR
- Una historia conocida pero no por ello menor.
- Todas las voces de los personajes están muy bien grabadas.
- Momentos puntuales que nos sacan de la monotonía del juego.
LO PEOR
- Visualmente es un producto para la tecnología VR.
- Igual que arriba, sus mecánicas jugables también se asocian más a un título VR.