Forza Motorsport 8 es un juego desarrollado por Turn 10 y publicado por Xbox Game Studios. Es la decimotercera entrega de la serie Forza y la octava de la serie Motorsport, que se centra en la simulación de carreras, en particular de competición. Han pasado nada menos que seis años desde la última entrega de Motorsport 7 y ahora Microsoft apuesta a que la octava entrega logre convertirse en líder en este género, superando a históricos como Gran Turismo o Assetto Corsa, entre otros. Veamos qué tan bueno es el juego y si vale la pena la inversión.

Un juego que logra ser adictivo ofreciendo múltiples campañas a lo Forza Motorsport

Forza Motorsport 8 es uno de esos juegos que logran cautivarme. La entrega anterior logró aferrarme al volante durante horas, y no solo fueron cuestiones tales como los gráficos, las físicas o los desafíos, sino que fue la misma propuesta del juego y su ejecución lo que más aportó para que eso suceda. En este caso, pasa algo parecido, ya que si bien se muestra con otra estética y de una manera algo diferente, la esencia es la misma.

Además del ya archiconocido modo multijugador, en donde podremos acceder a eventos homologados y eventos abiertos, contamos con el juego libre en el que podremos competir con nuestros autos en cualquier circuito, solos o con rivales. También veremos un modo multijugador privado pensado para jugar contra amigos.

Por otra parte, Forza Motorsport 8 nos invita a participar del modo Rivales, en el que tendremos tres opciones muy interesantes, en las que podremos jugar con todos los coches del juego y en las diferentes pistas. La primera es contrarreloj, en la que podremos competir con nuestros autos o con cualquiera de los otros que ofrece el juego a modo de préstamo (gratis), pero sin avanzar en puntos de experiencia. Además, contamos con «destacado», que son experiencias por tiempo limitado, y por último el VIP, exclusivo de Rivales para jugadores VIP. Es un apartado muy bueno para poder probar autos y decidir si queremos o no comprarlos.

Pero sin dudas lo mejor está en el modo carrera. Al entrar allí podremos ver el tour que nos ofrece el juego, primero con una introducción de algunas carreras y luego con la famosa copa de constructores. En esta última podremos ir pasando por diversos tours, los cuales contienen diferentes desafíos que nos irán invitando a subirnos en autos cada vez más sofisticados.

Por su parte, en destacado, tendremos aún más desafíos que se irán desbloqueando conforme pasen los días. En este caso, iremos contando con autos de diferentes categorías a medida que vayamos avanzando.

Forza Motorsport 8 nos invita a progresar en base a recompensas que vamos ganando al sobrepasar autos, al realizar buenas trazadas y al mejorar nuestros tiempos de vuelta. Esto nos permite avanzar en el nivel de experiencia, hasta el 50, lo que a su vez nos habilita a ir desbloqueando diferentes piezas que iremos montando en nuestro coche para obtener un mejor rendimiento. Estas piezas, una vez que las ganamos, las tendremos para siempre. Las mejoras impactan en el nivel de rendimiento del auto, traducido a un número: mientras más alto, mejor será nuestro coche en cada segmento.

Asimismo, antes de comenzar una carrera de Forza Motorsport 8, nos obliga a realizar una práctica de algunas vueltas para que podamos adaptarnos tanto al circuito como a nuestro auto. Posteriormente, nos mostrará una parrilla en donde podremos colocarnos al largar la carrera, en función del riesgo/recompensa: mientras más atrás estemos, más recompensa tendremos, pero más difícil será ganar la carrera.

Además, podremos configurar el nivel de dificultad de la IA en nuestros adversarios, y ajustar también la bonificación por conjunto de reglas. Tendremos tres opciones: Reglas del club, en la que solo recibiremos daños cosméticos, podremos rebobinar y no recibiremos penalizaciones. Por otro lado, las reglas deportivas en las cuales podremos simular el combustible y los neumáticos, las penalizaciones serán moderadas pero aún podremos contar con el rebobinado. Finalmente, las reglas experto, en las cuales las simulaciones serán de daños, de combustible y neumáticos, no contaremos con rebobinado y las penalizaciones serán más agresivas.

En esta nueva entrega se agregan las paradas en pits, con cinemáticas bastante bien logradas, con la posibilidad de gestionarlo de forma automática o manual.

Asimismo, podremos seleccionar entre 20 circuitos, algunos de renombre como Spa Francorchamps, Nurburgring, Silverstone, Suzuka, entre otros. Por su parte, contaremos con la opción de correr en diferentes momentos del día, desde la noche hasta el amanecer o la media tarde, y modificar las condiciones meteorológicas, desde condiciones variables hasta piso seco, semimojado (partes secas y mojadas) o muy mojado con lluvias leves a fuertes, niebla, etc.

Con respecto a los autos, tenemos la posibilidad de seleccionar entre 500, desde coches antiguos, pasando por autos de competición, de calle y hasta de fórmula, contando con los últimos autos de cada marca.

Gráficos excelentes, pero poca optimización

La serie Forza Motorsport ha sido muy destacada en el apartado gráfico desde sus inicios. En esta última entrega no decepciona y ofrece escenas con pistas extremadamente detalladas, con texturas y detalles excelentes, al igual que los autos, tanto por dentro en cada una de las cámaras que el juego ofrece como por fuera.

Además, contamos con compatibilidad con raytracing y DLSS. Con los gráficos puestos a tope, en ultra, el juego nos deleita y sorprende con unos gráficos excelentes, que tal vez no sean los mejores del mercado, pero estarían muy cerca de serlo.

De noche, los reflejos de las luces y carteles sobre el piso mojado son simplemente asombrosos, e incluso los reflejos del sol al amanecer sobre el asfalto son un espectáculo visual. Además, los efectos de luces son sensacionales, sobre todo en la cámara interior.

Las condiciones meteorológicas están muy bien resueltas, como ya es costumbre, aunque nos hubiese gustado ver escenas más hostiles con tormentas fuertes con mayor reducción de visibilidad.

El problema surge al querer alcanzar esa máxima capacidad gráfica del juego. Se supone que con nuestro equipo podríamos estar cerca de los requisitos recomendados, ya que una RTX 2080 TI es un poco más potente que una 3060 TI, cerca de un 10%. Pero los resultados fueron muy preocupantes tanto en los fps que pudimos alcanzar como en la estabilidad. Parece que al juego le hace falta una o varias actualizaciones para pulir la optimización. Esto es algo extraño, ya que históricamente Forza siempre ha sido un juego muy bien optimizado.

Decimos que es muy inconsistente ya que en una misma pista con una configuración gráfica podremos pasar de 100 fps a menos de 40, algo que claramente habla de un problema del juego y no de nuestro hardware. Además, se observa siempre que al llegar a la línea de meta, bajan los fps de forma abrupta, algo claramente identificable como bug.

Nos resultó muy difícil encontrar una configuración gráfica óptima. Con todo puesto en alto, nuestras últimas sensaciones fueron mejores, ya que en varias pistas logramos más de 100 fps. Tal vez la recomendación por el momento sea dejar todo en automático, para que sea el juego el que resuelva el punto justo entre optimización y calidad gráfica.

Pero definitivamente creemos que con todo puesto en ultra, deberíamos tener una mejor experiencia, o al menos en gráficos en alto, y sobre todo en estabilidad. Tal vez el mayor problema tenga que ver con el trazado de rayos, por lo que deberemos esperar un poco a que salgan actualizaciones que corrijan estos problemas. Insistimos en que con una RTX 3060 TI, acompañada por buena memoria RAM, procesador y SSD, deberíamos tener suficiente para correr todo a 60 fps estables en gráficos muy altos a 1080p.

Por último, destacar que este es un juego exigente, y para poder correrlo necesitaremos como mínimo una GTX 1060 de 6 GB, una placa con la que podiamos correr Forza Motorsport 7 con gráficos en alto. Y para poder correr el juego en ultra a grandes resoluciones (2k, 4k y hasta 8k), deberemos partir de una RTX 4080 en adelante si queremos obtener al menos 60 fps estables o más.

Gran jugabilidad, físicas algo inconsistentes

Llegamos a lo más importante del análisis. El momento en donde analizamos las físicas y la jugabilidad al mando de un volante de Logitech, el G923, uno de los más utilizados en el mundo por su versatilidad y precio accesible. Y lamentablemente, es uno de los puntos más polémicos del juego. En este punto vamos a encontrar luces y sombras.

Cuando empecé a probar Forza Motorsport 8, estaba muy contento por la sensación que tenía al volante. Pero con el correr de los días, comencé a darme cuenta de ciertos problemas que, a los más detallistas y exigentes, podría fastidiarles. Al resto del público, para aquellos que simplemente quieran divertirse, tal vez no les afecte en lo más mínimo.

Dado que el juego ofrece tres modos diferentes de asistencias a la conducción, comencé desde lo más fácil a lo más complejo, aumentando el grado de dificultad, que al fin de cuentas es la intención de Forza Motorsport 8: que progresemos y nos hagamos más expertos al volante. Con las asistencias al máximo, el juego se torna aburrido para los amantes de la simulación. Este modo es perfecto para quienes no quieren problemas y solo se predisponen a dar vueltas y pasar un rato jugando y disfrutando de los gráficos excelentes que ofrece el título, algo como si fuera un modo arcade.

Luego encontramos el modo deportivo, tanto para el control de tracción como para la estabilidad del coche, lo cual supone un desafío bastante más grande, pero con bastante control. Es un modo muy divertido que logra el equilibrio perfecto entre algo de simulación y el modo arcade. Se pueden experimentar tanto sobrevirancia como subvirancia, y cierto derrape, pero manteniendo un control razonable del auto.

Por último, el modo simulación, sin asistencias, supone el mayor desafío, pero nos encontramos con grandes inconsistencias dependiendo de las condiciones y el tipo de auto que elijamos. Hay autos que son prácticamente imposibles de manejar incluso en condiciones óptimas, con piso seco, mientras que otros son muy fáciles de manejar con piso mojado. Y no hablamos precisamente de autos poco potentes, ya que esto último lo probamos a bordo de un Porsche 911. Simplemente parecía que estábamos corriendo en piso seco, al acelerar a fondo en una curva, el auto casi no se movía. Eso es imposible que suceda en la vida real, sobre todo con la potencia de un 911.

El otro punto a destacar es cómo se siente la conducción en diversas condiciones. En piso mojado no se observan zonas con más o menos acumulación de agua, algo que sí pasaba y se sentía en el volante en Forza Motorsport 7. Aquí creemos que hubo una involución. Y por otro lado, como decíamos, a veces parece que con algunos autos no tenemos nada de agarre en piso seco, algo que puede ser considerado poco realista.

La respuesta al volante en general está bastante bien, aunque no es la mejor que hemos probado. En este sentido, creemos que le falta aún un poco más evolución para poder sentir efectos de pista más en nuestras manos. Los que están son muy buenos, pero tenemos que exigir más aún.

Por último, cabe destacar el tema de cómo está trabajada la IA en este juego. La verdad es que también la notamos algo «verde» por sus inconsistencias. A veces notamos que el líder se aleja demasiado y muy rápido, mientras que, contra el resto, podemos pelear más mano a mano. Por otro lado, vemos acciones raras como frenadas en medio de una recta, o salidas reiteradas de pista de parte de varios autos al mismo tiempo. Y en ciertas carreras, notamos que manteniendo la dificultad, logramos avanzar más fácilmente respecto a otras.

Buena música y gran sonido

La música a lo largo del juego acompaña muy bien, como nos tiene acostumbrados la saga. Dentro del juego, el sonido de cada auto es muy bueno, como también es costumbre en Forza, y se agregan efectos como el derrape o las colisiones que son realmente muy realistas. A juicio personal, me gustaba un poco más el sonido en los autos en la entrega anterior, pero también hay que decir que esto fue evolucionando en el tiempo, así que cabe esperar mejoras también en este apartado.

Requisitos mínimos

• CPU: i5-8400 (6 núcleos @ 2.8 Ghz) / Ryzen 5 1600 (6 núcleos @ 3.2 Ghz)
• Núcleos de la CPU: 6 núcleos físicos
• GPU: GTX 1060 (6 GB) / RX 5500 XT
• VRAM: 4GB
• Memoria del sistema: 8 GB dedicados
• Almacenamiento: 130 GB de espacio libre (SSD)
• Configuración: Baja

Requisitos recomendados

• CPU: i5-11600k / Ryzen 5 5600X
• Núcleos de la CPU: 6 núcleos físicos
• GPU: RTX 2080 Ti / RX 6800 XT
• VRAM: 8 GB
• Memoria del sistema: 16 GB
• Almacenamiento: 130 GB de espacio libre (SSD)
• Configuración: Alta

Requisitos ideales

• CPU: i7-11700k / Ryzen 7 5800X
• Núcleos de la CPU: 8 núcleos físicos
• GPU: RTX 4080 / RX 7900XT
• VRAM: 16 GB
• Memoria del sistema: 16 GB
• Almacenamiento: 130 GB de espacio libre (NvME SSD)
• Configuración: Ultra

LO MEJOR

Los gráficos son espectaculares
La jugabilidad es innovadora y versátil
La música y el sonido están muy bien logrados

LO PEOR

Inestabilidad en el rendimiento
Inconsistencia en fisicas
La IA no esta bien implementada en los autos