Nobody Wants to Die: Review – ¿Cuánta vida hay detrás de la muerte?

428

Todos en algún punto de nuestra vida adulta nos cuestionamos cuánto miedo nos genera el final inminente de nuestro camino; y no solo el propio, también el de nuestros seres queridos.

¿Pero ¿qué pasaría si tuviésemos la oportunidad de trasladar nuestra mente a un nuevo cuerpo? ¿Seguiríamos viviendo eternamente o en algún momento ese miedo termina transformándose en un extraño “deseo”?.

Algo similar se plantea en el gran guion de Nobody Wants to Die, desarrollado por Critical Hit Games y estrenado en el mercado el recién pasado 17 de julio, para PS5, Xbox Series X/S y PC.

Vidas pasadas repletas de trastornos, dolor y muerte

Volviendo un poco al primer texto y el foco central de la narrativa de NWTD, la vida ya solo vale lo que determina el mercado, una especie de suscripción anual a partir de la mayoría de edad.

Nos encontramos en la gran manzana de Manhattan, dentro de Nueva York, un lugar en donde no importa el contexto histórico, siempre encontraremos una vida de vicios, monotonía y escándalo político.
En pleno año 2339, vemos un mundo lúgubre, penumbroso y capitalista en donde incluso la vida tiene un precio, llegando al punto en que la comercialización de cuerpos humanos logra ser uno de los monopolios más fuertes e importantes para la humanidad. Las personas que deciden extender su vida y lograr la inmortalidad deben pagar una gran cantidad de dinero para poder hacerse con un nuevo cuerpo, o lo que ellos llaman “carcasa”, y trasladar su “icorita” (algo así como su mente) a un nuevo portador, para así lograr extender su vida unos años más siempre y cuando sigan pagando la suscripción de ese cuerpo nuevo; de lo contrario, su icorita permanecerá guardada y su cuerpo será capitalizado al mejor postor.

La mecánica central de NWTD no se caracteriza por ser un videojuego de acción directa, sino más de acertijos con una narrativa atrapante.

El tema más radical es que nos encontramos en un contexto en donde los ricos logran hacerse con los cuerpos mejor preservados y con mejores cualidades, mientras que los más desprotegidos solo pueden llegar a duras penas a conseguir uno de “segunda mano”; y ni hablemos de que la población más pobre se ve en la necesidad de alquilar sus antiguas carcasas para ganar algunos dólares extra y poder sobrevivir.

En esta entrega, nos ponemos en los pies de James Karra, un ex beisbolista que, luego de un incidente que lo deja sin poder jugar, se suscribe a una carcasa que le permite vivir retirado pero con un cargo en la Policía, específicamente en el Departamento de Mortalidad; pero con una historia personal repleta de heridas sin sanar, la muerte de su esposa y un incidente que le cuesta la vida a su compañero de patrulla, Seth.

Con el pasar del tiempo, James recibe una llamada en medio de un hiato laboral; era su jefe, quien le asigna un caso sobre la muerte de un pez gordo de la política neoliberal. Este encuentro pone a James en el epicentro de todo el trasfondo político sobre la venta de cuerpos, edad de suscripción y mucha más basura escondida bajo la alfombra.

Un detective capaz de modificar el tiempo

La mecánica central de NWTD no se caracteriza por ser un videojuego de acción directa, sino más de acertijos con una narrativa atrapante. Básicamente, nos encargamos de llegar a las escenas del crimen para lograr una reconstrucción completa de los sucesos.

Para esto, James cuenta con varias herramientas, siendo la más importante justamente su artefacto de reconstrucción, el cual puede usar información del entorno para recrear los eventos del pasado a su antojo. Podría decirse que se siente como una especie de viaje en el tiempo, pero aislado a un evento específico y con la posibilidad de adelantar o rebobinar a nuestro antojo. Por otro lado, también tendremos diferentes herramientas como un escáner y una lámpara UV.

El tema más radical es que nos encontramos en un contexto en donde los ricos logran hacerse con los cuerpos mejor preservados y con mejores cualidades, mientras que los más desprotegidos solo pueden llegar a duras penas a conseguir uno de “segunda mano”; y ni hablemos de que la población más pobre se ve en la necesidad de alquilar sus antiguas carcasas para ganar algunos dólares extra y poder sobrevivir.


La idea de cada escena del crimen es llevarnos un paso más adelante de la verdad, pero sin dejar de lado la historia personal de James, en su búsqueda de un suceso específico el cual no solo le costó la vida a su compañero Seth, sino también a su esposa Rachel. En cada pequeño avance de la historia, James deberá tomar decisiones difíciles, las cuales desencadenarán un hilo diferencial de la historia y diálogos específicos. Todos sabemos bien qué significa esto: Nobody Wants to Die cuenta con innumerables finales diferentes, lo cual lo hace un gran candidato para la rejugabilidad.

Una toma sacada de 1970

Si hay algo remanente de manera constante, es la esencia Retro-Cyberpunk traída sin miramientos desde Bioshock hasta NWTD. Experimentamos un mundo sumamente avanzado tecnológicamente, pero con una leve capa superficial de tiempos más sencillos como la década de los 70.

Vemos gráficos increíblemente bien llevados, limpios y con una gran atención al detalle. El diseño de las iluminaciones es sublime y con un nivel muy bueno. Cabe destacar que en algunos momentos vemos detalles mal logrados o sombras con comportamientos antinaturales, pero nada que un parche no pueda solucionar a tiempo.

La joyita del postre, a mi criterio, es la banda sonora, que es impresionante. Música disco, jazz y house llevan el estandarte y ritmo en todo sentido. De a momentos sentimos ese espíritu novelero de la época en cada cinemática; la atención al detalle es increíblemente palpable y estudiada.

LO MEJOR

  • Una historia diversa, dramática y atrapante.
  • Diferentes finales alternativos, algunos desbloquean escenas inéditas.

LO PEOR

  • Leves fallas gráficas de a momentos.

Nobody wants to die

  • 9.0

    Score

    Nobody Wants to Die es una de mis joyitas de este 2024. Es una entrega con dinámicas sencillas y fáciles de seguir, pero con una narrativa e historia que es atrapante desde el primer momento.
User Rating: 0 ( 0Votes )


Mi primer juego fue el Commander Keen, con eso ya saben mi edad. Entrenador Pokémon, y si me queda tiempo, trabajo un poco. Friends y Daft Punk en loop como modo de vida.


Deja un comentario