Apenas días después de que tuve la fortuna de probar el maravilloso ASTRO BOT ( del que pueden leer mí Review aquí mismo), me toca reseñar otro título que tiene la palabra Bot en su título. Y, si bien no son mecánicamente parecidos, este también tiene una clara inspección en una saga importante de Playstation.
AKIMBOT se encuentra disponible para Playstation 5, Xbox Series y PC
WE HAVE RATCHET & CLANK AT HOME
Dos segundos de tráiler fueron más que suficientes para darme cuenta de dónde sacó sus ideas este título. Claramente bebe de la fuente de RATCHET & CLANK, tanto en su diseño de personajes, ambientación, mecánicas jugables, historia y hasta en las personalidades de esos personajes. Pero vamos a tomarlo más como un homenaje que una copia. El juego fue desarrollado por Evil Raptor, un estudio independiente formado en 2020, y cuyo primer título fue PUMPKIN JACK, otro lindo juego que también fungió como homenaje a MEDIEVIL, otro clásico de la consola de Sony, y del que pueden leer mi review aquí.
Volviendo a AKIMBOT en si, la historia es la siguiente: al comenzar vamos a conocer a dos criminales que están siendo transportados hacia la cárcel. Ellos son Exe, un robot de combate acusado de mercenario, y Shipset, un dron parlanchín que realizó múltiples estafas. Gracias a las habilidades del dron, lograrán escapar, y por una serie de acontecimientos terminarán siendo contratados por el Embajador de ese planeta, quien requiere sus habilidades para detener a Evilware, una entidad que se apoderó del Artefacto, un dispositivo que otorga a su portador un poder inconmensurable y además le da la habilidad de poder controlar el tiempo y la realidad. Si el dúo logra arrebatar el Artefacto a Evilware y traerlo al Embajador, este no solo perdonará todos sus crímenes, sino que les promete dinero suficiente para que vivan en la opulencia por el resto de sus casi ilimitadas vidas.

Por supuesto, el dúo no se lo va a pensar dos veces, y a pesar de que no se soportan y que sus personalidades son completamente opuestas, van a tener que aprender a convivir y trabajar en equipo si quieren llevar a buen puerto su misión. Y así empieza una de las cosas buddy cop movies más divertidas que experimenté en los últimos tiempos.
DAME UN RESPIRO, TE LO PIDO POR FAVOR
No se dejen engañar por el aspecto amigable del juego: se trata de un shooter de acción con elementos de plataformas bastante duro y complicado.
A pesar de tener tres niveles de dificultad, y el mejor de ellos llamarse cool o tranquilo, la verdad es que es un título que va a poner a prueba nuestras habilidades al límite. Los niveles se dividen básicamente en secciones de combate contra múltiples enemigos y secciones de plataformeo furioso, aunque a veces pueden combinarse. En cuanto al combate, Exe, que es el personaje que vamos a manejar la mayor parte del tiempo, puede utilizar una espada para el combate cuerpo a cuerpo, que nos permite realizar también combos si apretamos el botón de ataque en secuencia, y además destruir objetos en el escenario. Al mismo tiempo podemos llevar hasta 8 armas, cuatro que conseguimos de forma obligatoria siguiendo la historia y cuatro que podemos comprar en determinados shops esparcidos por el mapa. Las armas básicas (2 tipos de ametralladora, un rifle de sniper y un lanzagranadas) tienen munición infinita pero su uso produce recalentamiento, así que solo pueden usarse un par de veces seguidas y luego hay que esperar a que se enfríen o cambiar a otra arma rápidamente. Las armas especiales, además de que pueden ser upgradeadas en los mismos shops que se adquieren con monedas que se consiguen el en juego, utilizan energía de munición, la que se consigue derrotando a enemigos, por lo cual esa es la única manera de recargarlas y su uso también es limitado, aunque son mucho más poderosas que las básicas.
En cuanto a las secciones de plataformeo, Exe tiene un doble salto, un gancho que le permite alcanzar platafomas lejanas y un dash que puede realizar tanto en el aire como en el suelo, y sirve no solo para avanzar más rápido sino también para cubrir un poco más de distancia en los saltos.

Por suerte cada uno de los más de 12 niveles tienen múltiples checkpoints, porque todas las secciones son bastante duras de sortear, además, y para los completistas, hay varios coleccionables, aunque también son difíciles de encontrar y están resguardados por una zona opcional que también es compleja de superar.
Por supuesto, no pueden faltar las batallas contra impresionantes y complejos bosses, y los puzzles. Además de algunas mecánicas clásicas como pisar en las baldosas en el orden correcto, empujar objetos o animales hacia el lugar correcto o tocar interruptores en cierto orden, hay una mecánica recurrente en todos los niveles, que sirve para abrir puertas, poder controlar vehículos o habilitar nuevas zonas: el hackeo. Cada vez que accedemos a una terminal que puede ser hackeada, entraremos en un minijuego que puede tener hasta cuatro variantes que se generan de forma random. Pueden ser el clásico juego de la víborita, donde tenemos que llevar a la “vibora” a comer los puntos sin chocar consigo misma o los bordes de la pantalla, el juego de “las tres conchas”, que es el de descubrir bajo que concha se esconde el ítem correcto, un minijuego de copiar rápidas secuencias de botones y por último uno de emparejar el cursor con símbolos en pantalla. Todos duran apenas un par de segundos, y es necesario que los aprendamos lo más rápido posible, ya que cada vez que fallamos no solo no hackeamos la terminal, por lo que habrá que repetir hasta lograrlo, sino que además perderemos una importante porción de la barra de vida.

Como dije, vamos a controlar a Exe la mayor parte del tiempo, pero habrá momentos en que su compañero Shipset tomará las riendas de la acción. Estas secuencias suelen ser cortas pero bastante frenéticas, donde habrá que recorrer pasillos estrechos a toda velocidad o pelear contra algún enemigo con una visual a lo fighting game noventoso, gráficos en pixel art incluídos. En otros momentos, incluso, vamos a estar a los mandos de diferentes vehículos, como autos, tanques o naves espaciales, que no solo aportan bocanadas de aire fresco a la jugabilidad, sino que traen consigo sus propias mecánicas jugables y sus escenarios.
UNA RELACIÓN DE AMOR Y ODIO
Uno de los aspectos más destacables es, justamente, la relación entre los personajes. La historia no es novedosa y está llena de clichés de los clásicos de ciencia ficción y antihéroes que salvan al mundo, pero la manera en que ambos protagonistas la llevan es lo mejor de la trama. Exe es el más antipático, serio y rudo, y no le gusta ni hacer bromas ni se anda con vueltas. Shipset es un completo dolor de cabeza. No para de hablar ni un segundo, de hacer comentarios fuera de lugar o graciosos y es bastante cobarde pero súper interesado y ambicioso. Como no podía ser de otra manera, sus personalidades tan diferentes van a ser un problema para ellos y su relación al principio de la historia, pero a medida que vayan conociéndose y trabajando en equipo, empezarán a valorarse el uno al otro y hasta a forjar una suerte de amistad.

Los diálogos entre ellos, y sobre todo los comentarios de Shipset, son muy divertidos, inteligentes y están muy bien escritos, e incluso se burlan haciendo referencias o chistes sobre otros juegos o películas, y hasta llegan a jugar un poco con la cuarta pared en más de una ocasión.
EFECTIVIDAD POR SOBRE ESPECTACULARIDAD
Adentrándonos en los aspectos técnicos de AKIMBOT, tenemos que decir que el juego está bien pero no mucho más. Gráficamente los diseños de personajes son funcionales y cumplen, pero sin sorprender. Todo se ve muy cuadrado y robótico, lo cual tiene perfecto sentido en un mundo donde solo existen robots (hasta algún diseño nos va a llamar la atención, como los soldados del Embajador, que son sospechosamente parecidos a los Spartans de HALO), pero los escenarios pecan de cierta repetición. Todos los ambientes son muy parecidos entre si, incluso en las tonalidades de colores utilizados, y además como se trata de mundos semiabiertos y no contamos ni con una brújula ni mapas de los lugares, la posibilidad de perderse es real, sobre todo el las secciones de conducción. No es un problema demasiado grave, pero si un poco molesto. Además, ciertos elementos como el plataformeo por encima de algún líquido que nos mate (lava, agua, ácido, lo que sea) o el recorrido por paneles sobre los que Exe corre de costado, se repiten en prácticamente todos los niveles, lo que contribuye a esa sensación de “esto ya lo hice un montón de veces” en el juego. Las secciones temporizadas también son un dolor de cabeza, porque los límites impuestos son ajustadísimos, y los recorridos suelen ser difíciles, por lo que un error de un par de segundos nos suele llevar al inevitable fracaso, y a la inevitable frustración. Se soluciona con práctica, por supuesto, pero requiere tiempo y paciencia.

El aspecto sonoro tiene sus altibajos. La mejor parte se la llevan los diálogos y las actuaciones de voz. Todos los actores interpretan su papel de forma magistral, y sobre todo el dúo principal, cuya dinámica en la pantalla es sobresaliente. Nada se siente forzado ni fuera de lugar, y escuchar sus conversaciones es una diversión aparte. Las melodías están bien, aunque también tienden a repetirse entre niveles, y los efectos de sonido son…raros. Las explosiones, disparos y ruidos de vehículos están bien realizados, pero hay un algo que no llega a ser molesto pero si curioso. Durante TODOS los niveles hay una especie de ruidos ambientales indescriptibles, que nos acompañan todo el tiempo. No me sale explicarlo bien, pero es como que hay una especie de sonidos y risas robóticas, chillidos y similares que suenan todo el tiempo y en todos los niveles, que no llego a entender que función cumplen pero que están siempre ahí. No se me ocurre otra forma de explicarlo, seguramente hay que jugar para entenderlo, pero es, mínimamente, raro.
Jugablemente el juego es muy entretenido. Los 12 niveles del juego nos brindarán aproximadamente la misma cantidad de horas de entretenimiento . Las escenas de combate son duras, el plataformeo requiere altas habilidades, pero si uno es lo suficientemente paciente y tiene alta tolerancia a la frustración (o es un capo jugando a este tipo de juegos), va a disfrutar de una linda historia, con una gran relación entre los personajes principales, diálogos bien escritos y mecánicas desafiantes y adictivas.

LO MEJOR
- Sin lugar a dudas, el desarrollo de la relación entre los personajes y los diálogos entre ellos
- A pesar de innovar en nada, tiene un gameplay sólido
- Su esfuerzo por meter múltiples mecánicas variadas
LO PEOR
- Técnicamente es simplemente correcto
- Por momentos aparecen picos de dificultad insufribles, aunque no pasa seguido
- Algunas mecánicas, como los hackeos o el platforming sobre elementos nocivos, se repiten demasiado