Luego de varios años, llega el segundo juego que protagoniza la querida Princesa Peach, después de casi veinte años. Esta vez para la Switch, Nintendo nos ofrece una aventura teatral con muchos matices y variedad.
Princess Peach: Showtime! está disponible en Nintendo Switch.
Para Peach, un buen día que arrancaba con un plan de relajación y entretenimiento termina en una aventura inolvidable. Ella y algunos de sus Toad deciden visitar el teatro Sparkle, un teatro enorme con muchas obras, una promesa tentadora para pasar el rato y visitar. A poco de llegar la bruja Grape ataca y se apodera del teatro (y sus obras), atrapando a todos los presentes adentro del edificio.

Luego de todo ese kilombo, Peach conoce a Stella, que vendría a ser una estrellita muy simpática que hace las veces de hada guardiana del teatro. Esta última acompaña a Peach en su misión de recuperar el teatro, y le permite usar el poder del Sparkle, este le permite acceder a diversas transformaciones dependiendo de la ocasión. Parte de su misión va a ser rescatar a los Sparklas del teatro, que serían como los theets actores protagonistas de cada obra. Si están un poco confundidos por la forma de nombrar las cosas en este juego, no son los únicos, Stella, Sparkles, Sparklas, todo suena muy parecido.
El juego introduce a los Theets, unos monigotes con cabeza redonda y una narizota que puede iluminarse (a lo Rodolfo el Reno). Dentro de lo que hicieron para el universo de Mario, no me parecen las criaturas más inspiradas ni las más interesantes, pero es una manera y salida fácil para generar personajes sin tener que diseñarlos mucho. Como los Toads ahora que lo pienso, pero menos expresivos, al no tener boca visible. Estos van a ser casi el 90% de los personajes que nos encontremos en esta aventura.

REALEZA TEATRAL
Princess Peach: Showtime! es un juego de aventuras con algo de plataformeo, no enteramente 2D, ya que los niveles tienen algo de profundidad. El teatro funciona como un enorme hub en el que podemos acceder a los niveles. Cada uno de estos representa una obra de teatro en la que de una forma u otra, terminaremos formando parte.
El gimmick de este título es que Peach puede tomar varias formas, dependiendo de la obra que estemos jugando. A lo largo de estos niveles va a ser espadachina, vaquera, pastelera, patinadora, ladrona, ninja, detective, maestra de kung-fu, sirena y hasta guerrera intergaláctica. Peach realmente lo puede todo. Cada una de estas transformaciones cambia la forma de jugar, dándonos bastante variedad de gameplay en cada stage.

El juego no va a bombardearnos con tutoriales por cada pequeño o gran cambio de gameplay que cada nivel introduzca. Por suerte, estos son opcionales, y si no deducimos por nuestra cuenta qué hay que hacer y cómo, con el botón X podemos fijarnos.
Todas estas variantes permiten que el gameplay escape la premisa plataformera a otros géneros menos esperables.
Los niveles de detective nos van a tener resolviendo misterios, los de pastelería van a hacernos decorar tortas, hay hasta secciones de naves, algunas de stealth, y hasta de running en auto-scroll velozmente. Esto mientras vemos el nivel como si fuera una obra teatral, con una breve historia, inicio, desarrollo y final.

Siguiendo la línea de la franquicia y de este tipo de juegos, no iban a faltar los colectibles. En cada nivel podemos juntar unas estrellas especiales, en general avanzando vamos a obtenerlas, pero algunas son opcionales y nos las podemos perder. Ir obteniendo estas estrellas nos va a indicar más o menos por qué parte del nivel estamos. Hay un Theet por nivel que está bien oculto, que va a darnos un moñito si lo encontramos. Hay también monedas de las normales por casi todos lados. Juntar todas las estrellas y el moño de cada nivel nos va a recompensar con una foto en la galería.
Cuando no estemos con alguna transformación, podemos usar el botón de acción para hacer un ataque corto con poder Sparkle, que se usa para activar objetos además. Generalmente interactuar con cosas hace que nos den algunas monedas extra. Hay suficientes monedas como para ignorar esto si no fuera que las condiciones de algunas estrellas en los niveles están bajo hacer florecer, por ejemplo, todas las plantas de una pequeña sección.

Hay una tienda en la planta baja en la que vamos a poder comprar outfits a medida que vayamos terminando niveles, en general son colores nuevos para Stella y algún estampado especial para el vestido de Peach. En esto vamos a gastar la mayoría de las monedas comunes que vayamos juntando
Lo que más me gustó y el punto fuerte del título son los bosses. Una vez que completamos los cuatro niveles de cada piso del teatro, tendremos que luchar contra un boss para subir al siguiente. Estos están muy bien diseñados, son peleas divertidas y si jugaron algún juego de Mario de los últimos años, siguen más o menos esa línea de diseño.

¿CIERRA EL TELÓN?
Princess Peach: Showtime! sufre de algunos pequeños problemas de performance que ya están siendo clásicos en la plataforma, y que evidencian un poco la necesidad cada vez mayor de Nintendo en mejorar el hardware (¿Para cuándo la Switch 2 amigos?).
El juego no se ve tan bien como otros similares, que salieron hace años y no tenían estos problemas (Odyssey sin ir más lejos, para poner un ejemplo), y sin embargo presentan caídas bastante aleatorias de framerate, haciendo que algunas cutscenes se vean feas. Podría estar un poco mejor optimizado, sorprendentemente me funcionó mejor en la Lite que en la consola principal jugando dockeado.
Otro punto a destacar es que el gameplay es muy pero muy sencillo. Tenemos un botón para saltar y uno de acción, y eso es todo. Esto sin contar el botón para “posar” que nos sirve solo para acceder a algunas zonas secretas. En algunos momentos ni siquiera tendremos que saltar, con un solo botón se simplifica todo. Esto se refuerza en algunas secciones en donde solamente tenemos que apretar el único botón de acción en momentos justos, casi a lo QTE, o mashearlo rápidamente para lo mismo. Las partes de investigación y puzzle también son bastante obvias:

Por esto último, el juego no deja de ser divertido ni de tener un nivel de calidad de producto que uno espera de juegos mainline de Nintendo.
Quizás esta simpleza sea porque este en particular sea más apuntado para chicos también. Se puede hacer algo que sea para chicos y grandes por igual, como este título, algo contrario a lo que hace Foamstars, que termina siendo algo infantil en otro estilo, uno que le da cringe a grandes y chicos. Punto para la franquicia de Mario en esto.
El juego no es particularmente largo, puede terminarse en unas ocho o diez horas jugando sin apurarse. Este tipo de juegos suelen tener muchas más horas virtuales de juego si decidimos completarlos al 100%. Al terminarlo pensé que sería una tarea divertida, pero no tardaría en cambiar de opinión. Los colectibles no son necesariamente difíciles de encontrar (aunque hay algunos bien ocultos), el problema es que si nos perdemos de alguno, vamos a tener que repetir el nivel desde el inicio. No hay forma de reiniciar secciones manualmente ni elegir partes de cada nivel. Teniendo en cuenta que cada nivel dura de diez a veinte minutos, y que no podemos saltearnos las escenas y diálogos, hace que sea poco divertido (y repetitivo) buscar esa estrella o moño que nos faltaba.

En mi opinión, además, no hay suficiente incentivo para completar el juego. Al terminarlo, podemos seguir jugando y se desbloquean algunas cosas nuevas para hacer. Va a aparecer un nuevo vendedor en la tienda, que va a intercambiarnos las estrellas por decoraciones para el teatro. Y se desbloquean dos desafíos nuevos bastante demandantes: el Hide and Seek y Boss Challenges. En el primero tendremos que rejugar los niveles y encontrar Theets ocultos, básicamente rejugar casi todo el juego entero como mínimo para poderlos encontrar todos, y si nos perdemos uno, tendremos que rejugar ese nivel de vuelta. Los Boss Challenges son especialmente difíciles, cada boss tiene hasta tres condiciones especiales que debemos cumplir, estas incluyen no recibir daño (suele ser común a todos los desafíos) entre otras condiciones bien jodidas.

LO MEJOR
- Una divertida (aunque corta) aventura que casi todos pueden disfrutar.
- Un juego relajado para jugar sin hacernos mucho problema, ideal para los más chicos.
- Muchísima variedad de gameplay que consigue no aburrir ni agobiarnos.
LO PEOR
- Algunas caídas de framerate en momentos aleatorios.
- Para buscar los colectibles faltantes tenemos que repetir niveles enteros, algo que lleva tiempo y desincentiva la rejugabilidad.
- El gameplay peca de ser demasiado sencillo.