Ésta nota es continuación de la primera parte de mí análisis sobre el impresionante Street Fighter 6.
MÁS DE LO MISMO NUNCA. SIEMPRE MEJOR
Cómo había mencionado en la parte anterior, Street Fighter 6 está dividido en 3 grandes partes, bien diferenciadas una de la otra. El modo World Tour, del cual ya hablamos largo y tendido con anterioridad, Battle Hub y Fighting Ground, modos de los que nos ocuparemos ahora.
Fighting Ground vendría a ser el modo clásico de juego, donde peleamos en combates mano a mano usando los luchadores oficiales diseñados para el juego. Por un lado, regresan los ocho luchadores originales del primer Street Fighter: Ken, Ryu, Honda, Zangief, Chun-Li, Dhalsim, Blanka y Guile. Tenemos además otra aparición de dos leyendas nacidas en Super Street Fighter 2: Cammy y Dee Jay. Vuelve también una vez más Juri, infaltable desde su primera aparición en Street Fighter 4. Y tal como mencioné en la nota anterior, ésta vez el protagonista principal es Luke, quien había sido agregado como el último DLC de Street Fighter 5, casi 6 años después del lanzamiento de ese juego. Increíble.

Los nuevos luchadores que trae ésta versión son Jamie (Hong Kong), que pelea usando un estilo que mezcla movimientos de breakdance con el arte marcial conocida como “El Mono Borracho”, Marisa (Italia), una mole de dos metros y medio de puro músculo, gladiadora en el Coliseo Romano y que utiliza su fuerza extrema para partir tu mandarina en gajos, Lily (México) una jovencita que lucha ayudándose de los espíritus de la naturaleza y que parece que tiene alguna relación con Thunderhawk, Manon (Francia), una mujer con una destreza física impresionante, que combate usando movimientos de agarre en combinación con danza clásica, Kimberly (Estados Unidos), una joven afroamericana con movimientos dignos de un verdadero ninja, que se encuentra investigando la desaparición de su padre y tiene como principal sospechoso a JP (Rusia), el último personaje nuevo por ahora, y quién se antoja como el nuevo malo más maloso de la saga, con intenciones de crear una nueva organización terrorista similar a Shadaloo.

Fighting Ground se divide, a su vez, en otras múltiples opciones. Por un lado está el modo Arcade, donde jugamos la historia personal de cada uno de los personajes. Este modo puede configurarse para que sea de solo 5 o 12 peleas, y tiene un par de bonus rounds en medio. Hay dos tipos de bonus rounds y ambos están muy buenos. Por un lado, tenemos que destruir un camión a golpes, así como aquél clásico del auto en los primeros juegos; por otro, tenemos que rechazar una serie de balones de básquet que una persona nos lanza, utilizando solamente ataques aéreos. La verdad es que resultan muy entretenidos ambos. Una de las mejores cosas que tiene el modo Arcade es que, a medida que vayamos jugando, iremos desbloqueando cientos de ilustraciones oficiales de diferentes artistas muy reconocidos, que reflejan toda la historia de la saga desde sus comienzos, y que luego podremos visualizar cuando deseemos en una galería copada.
El modo Entrenamiento también es muy completo. Podremos no solo aprender a controlar a los personajes, sino que hasta tendremos videos explicativos de las fortalezas y debilidades de cada uno y tutoriales de los mejores combos que podemos realizar.

El Versus es el simple combate, tanto contra la máquina como contra otro jugador. La novedad en este apartado es que ahora podemos optar incluso por combates entre equipos, de hasta 3 miembros cada uno.
Otro punto fuerte dentro de Fighting Ground es el modo de Batalla Extrema. Funciona básicamente como el modo Versus pero justamente las peleas tienen condiciones…extremas. Durante cada batalla, además de cuidarnos de los ataques de nuestro rival, debemos tener en cuenta otros factores que pueden desbalancear el combate. Por un lado, pueden ser peligros que afecten nuestra barra de vida, cómo explosivos que caen aleatoriamente en pantalla, toros que pasan corriendo y nos topetean o barras que nos electrocutan. Lo más lindo en que incluso podemos combinar dichos peligros con ciertas condiciones obligatorias para ganar el combate, como tener que derribar al rival cierto número de veces, solo poder hacer daño con determinados movimientos o, por ejemplo, no poder saltar. La combinación de varios factores a elección hace realmente que los combates se vuelvan realmente interesantes.
Por último, dentro de Fighting Ground se encuentra el modo online clásico, tanto casual como rankeado, en el que combatimos contra otras personas utilizando los luchadores oficiales del juego.

HOLA, ¿QUERÉS SER MI AMIGO?
El último modo de Street Fighter 6 es el también novedoso Battle Hub. Este vendría a ser el modo de encuentro online entre los jugadores humanos, utilizando los avatares creados para el World Tour.
La realidad es que no tuve demasiado tiempo de prueba de este modo pre lanzamiento justamente porque este modo recién se habilitó el 1 de junio, un día antes del lanzamiento al público general.
De todas formas, este modo es realmente prometedor. Se trata de lobbys divididos por regiones en los que vamos a estar compartiendo y conviviendo con los demás jugadores en sus formas de avatares. Podemos charlar mediante un chat interno, pelear en contra de otros jugadores en nuestras formas customizadas, acceder también al modo online clásico con los luchadores oficiales mediante unas máquinas arcade distribuidas por el lugar, hacer amigos, participar en torneos o eventos, unirnos a clubes o incluso jugar a juegos anteriores de la saga (ésta última opción no la pude probar pero está incluída en las características del Battle Hub). Así que, como verán, este modo es la mar de interesante.

CONTROLES PARA TODOS LOS NIVELES
En una era tecnológico – videojueguil dónde la inclusión está en su punto más alto histórico, no es sorpresa para nadie que Street Fighter 6 tiene diferentes opciones de accesibilidad. Por un lado, tiene 3 tipos de control: Clásico, en el que los personajes se controlan con los mismos movimientos de toda la vida (haciendo las clásicas U para adelante, U para atrás, adelante abajo adelante y esas yerbas), Moderno, limita los movimienntos a 4 botones, y nos permite realizar autocombos y golpes especiales con solo un botón (Y que curiosamente es el control por default del juego) y finalmente el Dinámico, que lo podemos ir adaptando de acuerdo a nuestras habilidades.
Los puristas de Street Fighter pueden considerar esto una decisión polémica, de hecho debo confesar que de entrada me pareció algo medio raro que habilitaran jugar con combos y especiales con un solo botón en un juego con un componente competitivo tan fuerte, pero la realidad es, al menos a nivel personal, siento que ésta vez están tratando de meter gente a jugar, a divertirse y no a tratar de subir rangos en modos competitivos. De hecho, me gusta mucho sacar trofeos en los juegos y ésta vez sacaron los relacionados a llegar a las ligas más altas en el modo rankeado online, algo que me alejó del platino de Street Fighter 5. No soy malo jugando, por supuesto, pero para llegar a esos rangos hay que ser una verdadera bestia con miles de horas invertidas y una habilidad sobrenatural, alguien que no soy.

Incluso el ambiente de “competición divertida” está tan marcado que los luchadores entran por un pasillo antes de cada pelea, hacen gestos a la cámara, podemos hacer emotes con su cara en las pantallas pre combate y hasta tenemos la posibilidad de activar a un par de comentaristas que van relatando la pelea con una precisión asombrosa y una gran variedad de frases, como para que nos sintamos que estamos directamente participando de la EVO.
Además, ahora el juego incluye un nuevo sistema llamado Drive. El Drive funciona con una barra de energía que se ubica debajo de la barra de vida de nuestro personaje, y nos permite realizar acciones como golpes que son mucho más poderosos, y pueden llegar a stunnear al rival si trata de bloquearlos o incluso ser lanzado contra una pared, quedando a merced del siguiente movimiento nuestro. También nos permite realizar un movimiento de parry, que hace que podamos rechazar incluso golpes especiales sin ningún tipo de daño. La barra de Drive se va consumiendo con cada uso y luego se va recargando lentamente sola, pero hay que usarla con cuidado porque si la vaciamos por completo, entraremos en un estado conocido como Burnout, una especie de cansancio del luchador, durante el cual por varios segundos seremos más lentos, haremos menos daño y recibiremos más, por lo que no es recomendable llegar a este punto.

Y COMO SE VE Y SE ESCUCHA ESTO?
Excelente. Capcom utilizó el RE Engine cómo motor gráfico del juego, y ya sabemos la calidad que tiene ese motor. Los personajes se ven grandiosos, súper coloridos y anchos, como ya sabemos que a la empresa le gusta hacer últimamente. Todos los movimientos de Drive y Especiales se ven espectaculares, con explosiones de colores y ralentizaciones de cámara realmente épicas. Lo mejor es cuando realizamos un Critical Art, dónde los ángulos de cámara van cambiando, se acercan, alejan y rotan mientras el rival va recibiendo el daño.
Los escenarios también lucen maravillosos, llenos de elementos en movimiento en los fondos que además van cambiando sus acciones o posiciones durante la pelea. Gladiadores y leones en el Coliseo Romano, gente bailando en Jamaica o los miembros de Mad Gear en Metro City, todo tiene vida propia en el fondo mientas la pelea se desarrolla en primer plano.

La música merece un capítulo aparte. Una mezcla de temas de rap y hip-hop que personalmente me parece que suenan muy bien, sumado a varias reversiones de temas de otros juegos, como Street Fighter 3. La realidad es que la música tuvo críticas mixtas, hay gente que considera que no es propicia para este tipo de juego, pero a mí me encantó y creo que le otorga al título una personalidad única que lo diferencia del resto de la saga.
LO MEJOR
- Los nuevos personajes tienen carisma.
- Adaptabilidad a cualquier tipo de jugador.
- Divertido y más relajado que nunca.
LO PEOR
- El online está durísimo desde el día uno, palabra.
- Que no se haya podido probar un poco más el Battle Hub pre lanzamiento.
- Que no tengamos YA YA YA los personajes DLC (jaja).