¿Siempre soñaste con ser una bruja? El nuevo juego de Deconstructeam, The cosmic wheel sisterhood, nos invita a sumergirnos en una aventura narrativa donde tomamos el control de una bruja capaz de predecir el futuro con sus cartas de tarot.
The cosmic wheel sisterhood se encuentra disponible para PC y Nintendo Switch.
Hace ya varios años jugué The Red Strings Club, una experiencia narrativa que durante varios días me dejó pensando en todo lo vivido en la pantalla. Un juego que te invita a la reflexión, una experiencia que va mucho más allá de lo jugable en sí.
Cuanto me enteré que el mismo equipo de desarrollo iba a lanzar una nueva experiencia narrativa, esta vez enfocada en el mundo de las brujas y el tarot, sabía que tenía que probarlo en cuanto fuera posible.
Brujas, tarot, soledad… y mucho más
The cosmic wheel sisterhood nos invita a ponernos en la piel de Fortuna, una bruja adivina que se encuentra cumpliendo una condena en el exilio. Por el momento, lleva 200 años para cumplir los 1000 años de castigo. ¿Qué la llevó a tener una pena tan extrema? Simplemente anticipar el fin del aquelarre.
Suena un poco injusto que tenga que pasar 1000 años exiliada por lo que dijeron sus cartas de tarot, ¿no? Bueno, ella también lo cree y por ese motivo decide invocar a un behemot, una entidad completamente prohibida en el mundo brujil. Un ser extremadamente poderoso, capaz de nutrir a la mismísima fortuna de un poder inigualable.
Considero que ahondar mucho más en la trama de The cosmic… sería casi un pecado. Es esa clase de títulos donde la historia es tan importante que hasta el más mínimo detalle podría arruinar la experiencia. La información se nos va dando casi a cuentagotas y hasta el giro más pequeño resulta toda una revelación. Una vez más, contar algún suceso, por mínimo que sea, es, en mi opinión, un spoiler.
Sólo me voy a limitar a decir que la historia es una montaña rusa de diversas emociones y múltiples estadios.
Nos hace reflexionar, nos hace pensar, nos hace debatir. Es un título que constantemente nos lleva y trae. Una estructura sólida, bien contada; una experiencia que, además, se siente personal por la forma en que las decisiones que tomemos sí importan. Sí, The cosmic… es otro título donde debemos tomar decisiones.
Y hasta una decisión que podría parecer pasajera al inicio de la partida tiene impacto en el final.
Al momento de escribir esta reseña sigo cuestionándome por un camino que opté a los pocos minutos de haber empezado la partida.
¡¡Podés crear tu propio mazo!!
Si bien el corazón del juego se encuentra en el desarrollo de la historia y cómo la vamos moldeando con las decisiones que tomemos, hay otro elemento clave que hace de The Cosmic… una experiencia casi única: la posibilidad de diseñar nuestro propio mazo de tarot.
A través de los cuatro elementos principales: aire (contexto), agua (emociones), tierra (determinación) y fuego (conflicto) podremos ir creando cartas para sumar a la baraja (al principio estaremos más limitados ya que se tiene poco de dichos elementos). ¿Y el diseño? Bueno, para ello contamos con la posibilidad de elegir el escenario (el fondo), el arcano (la figura central) y unos adornos extra (todos ellos costarán una determinada cantidad de elementos).
Pero no termina ahí. Además de seleccionar nuestras “figuritas” favoritas también podremos trabajar sobre el tamaño, la ubicación y la inclinación de estas, haciendo que la experiencia de crear una carta sea lo más libre posible. Un sueño hecho realidad: un mazo de tarot casi 100% personalizado.
Vení que te hago una lectura
Un mazo de tarot no tendría gracia si no tuviésemos a nadie a quién tirarle las cartas. Y, por ello, el título nos alcanza decenas de personas para que podamos “leerles el futuro”.
*Punto aparte, si bien no voy a ahondar en los personajes secundarios en cuestión, realmente hay un trabajo muy cuidado para que cada uno de ellos importe. Todos, a mayor o menor medida, tienen un desarrollo, un motivo, un porqué.
Siguiendo… la lectura en sí es un procedimiento básico: la persona interesada hace una pregunta puntual (o más), barajamos nuestro mazo y, por cuestiones de azar, sale una carta determinada (o más). Ahí podremos seleccionar entre varias opciones cuál es la respuesta que creemos (o queremos) que sea más acorde. Estas lecturas, además, nos permitirán recolectar más energía.
Una sensación extrañamente cozy
Pese a que la historia puede sentirse un poco desoladora por momentos, el trabajo artístico detrás de The Cosmic… hace que el mismo se sienta como una suerte de cozy games.
Sus colores vivos y su extraño minimalismo atestado de muy pequeños detalles hacen el que título se sienta acogedor desde lo visual. El juego parece decirnos que no hay nada a lo que temer.
Previamente mencioné cómo cada personaje secundario brillaba. Y esto no se debe sólo al carisma de cada uno de ellos desde un lado narrativo, sino también a la personalidad que tienen desde un lado visual. El diseño de cada personaje es, simplemente, fantástico. Una vez más, por más secundario que sea, cada uno brilla con luz propia.
Para coronar la frutilla del postre, el apartado sonoro también sabe jugar en este terreno. La banda sonora no está de fondo simplemente cumpliendo su cuota, sino que está perfectamente colocada para cada momento. The cosmic… es una montaña rusa de emociones, y cada una de esas emociones se acompaña con una melodía particular; nada de poner el mismo sonido para absolutamente todo.
LO MEJOR
- Una historia intensa, atrapante, repleta de pequeños giros.
- La posibilidad de diseñar tus propias cartas de tarot
LO PEOR
- Sólo por decir algo, más allá de que los personajes tengan un hermoso diseño, sólo tienen dos expresiones faciales.
