El estudio Blue Manchu, fundado por Jonathan Chey (uno de los responsables de Bioshock y System Shock 2) presenta Void Bastards, un juego que mezcla elementos de estrategia de naves, supervivencia, acción en primera persona y sigilo. Todo en un mismo combo.
Presos reciclables
Nuestros protagonistas son variados y aunque tengan rasgos marcados y un objetivo; son más bien desechables. Ya que la historia de Void Bastards nos sitúa arriba de la nave S.T.E.V. que recluta una serie de prisioneros del arca del vacio para completar misiones en la nebulosa de Sargasso. Completar cada hazaña se verá interrumpida por diversos alienigenas, piratas espaciales y otras criaturas que tratarán de impedir nuestro avance.
Pero la muerte no es el fin de nuestra historia, una vez que seamos eliminados el S.T.E.V. buscará un reemplazo a nuestro protagonista que tendrá que seguir abordando las naves encontradas en el camino.
Con mucho humor negro y guiños a otras aventuras espaciales, la historia de Void Bastards te captura automáticamente. La relación de la nave, que posee una inteligencia artificial, con nuestros protagonistas, que no tienen voz y un casco que tapa sus emociones, es lo más divertido del relato.
Un roguelite en el espacio: aprendiendo de nuestros errores
El tiempo que le dediquemos a Void Bastards será la clave de nuestro éxito o fracaso. Cuando comienza el juego partiremos de nuestra nave con un poco dinero, comida, combustible y salud. Cada preso tiene una característica positiva o negativa: algunos tosen alertando a los enemigos, otros son enanos o muy altos, brazos largos, son detectados más fácilmente, visión borrosa; etc. Estos elementos (aunque estéticos) realmente ayudan o dificultan nuestras misiones.
Al principio de nuestra aventura avanzaremos en el mapa (cada movimiento nos consume un combustible y una comida). Tendremos la opción de seguir salvo cuando nos quedemos sin combustible, si no tenemos comida podemos avanzar pero perderemos salud y estaremos hambrientos. En estos casos entrar a las naves dispersas en el mapa serán nuestra única opción.
La primera vez que lo hagamos moriremos por falta de oxigeno o por atacar inconscientemente a algún enemigo. Cada vez que morimos volvemos al comienzo de nuestra aventura con un pack básico de supervivencia pero con los elementos que encontramos en cada nave. Por qué el objetivo principal de Void Bastards es recolectar todo lo que vemos. Cada cosa puede servir para algo, ya sea para crear armas nuevas, tener más oxigeno o más salud. Más adelante en la aventura encontraremos torpedos para liberarnos de las naves piratas o llaves que nos teletransportan varios casilleros hacia adelante sin consumir combustible o comida.
Hay otros elementos que son materiales se dividen en: bio, datos, plaz, escoria y voltios. Para crear ciertos objetos necesitamos conseguir varios de estos elementos. El reciclaje termina siendo un tema importante de la aventura: tanto nuestros objetos y héroes son desechables pero siempre algo recuperamos de ellos.
Los enemigos no son tan variados como quisiéramos en Void Bastards. Se dividen en pequeños, medianos y grandes. Su tamaño a veces indica la fuerza que tienen, algunos tienen escudos, otros desaparecen y aparecen atrás nuestro. Hay torretas muy desafiantes, unas pequeñas criaturas llamadas turistas que explotan si nos acercamos. Finalmente los más complicados, los piratas que aparecen cuando siguen nuestra nave y los robots de seguridad que se activan cuando una cámara nos observa por mucho tiempo.
Las armas tampoco son variadas pero cada una tiene su fortaleza para cierta clase de enemigo. Hay una pistola, otra similar a una escopeta y un arma que lanza rayos que atraviesan las paredes. Armas secundarias como minas, bombas, dardos venenosos y una de las favoritas un pequeño gato robot que distrae al enemigo y en su mayor nivel explota ocasionando bastante daño.
Como mencionamos al principio de la nota, las posibilidades de Void Bastards son muchas. Cuando estamos a bordo de una nave podremos atacar a nuestros enemigos hasta vencerlos para ver si desprenden algún objeto, otras caminaremos despacio sin hacer ruido utilizando el sigilo como nuestra mejor herramienta; y finalmente nuestra astucia puede encerrarlos o dirigirlos a alguna trampa que colocamos.
También podremos tomarnos un café que nos da más fuerza y velocidad, desactivar la seguridad por un tiempo limitado, reciclar basura por dinero y bajarnos información de la ubicación de objetos y enemigos.
La historia va avanzando a medida que consigamos una cierta cantidad de elementos que nos indica el mapa para construir una u otra cosa. Aunque el chiste es que siempre nos falta algo para terminar nuestra aventura y tenemos que seguir por la nebulosa.
Entre viñetas y cel-shading
Desde su portada de inicio, el estilo de cómic es parte de la visual de Void Bastards. Cada momento de la historia esta contado por viñetas. Cada recuadro, elemento y personaje esta diseñado por la técnica de cel-shading, vista en juegos como Borderlands o en películas como A Scanner Darkly. Dibujos con mucho color y contornos negros, sumando las clásicas onomatopeyas de carteles dibujados como cuando un enemigo se acerca, se destruye, disparamos un arma o corremos.
No hay dudas que el esfuerzo de los desarrolladores fue a parar a su apartado visual, y tanto la música como su apartado sonoro puede ser más bien funcional o repetitivo en la aventura.
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