A fines de los 80s y principios de los 90s las aventuras gráficas del tipo point-and-click eran uno de los géneros más populares de los videojuegos, sobre todo en PC. Sierra, Lucas Arts, Virgin y muchas empresas legendarias más sacaron decenas de títulos maravillosos que los más viejitos recordamos con mucho cariño. Ahora, y tras 28 años de espera, uno de ellos regresa completamente renovado a los sistemas modernos.
BEYOND A STEEL SKY está disponible para Playstation 4, Xbox One y PC.
UNA AMISTAD DE HIERRO…LITERALMENTE
BEYOND A STEEL SKY es la continuación directa de BENEATH A STEEL SKY, una legendaria aventura gráfica de temática cyberpunk que salió para PC en 1994. Al tratarse de una secuela directa después de más de 27 (SI, VEINTISIETE) años, saber mínimamente lo que ocurrió en el primer juego es necesario para entender su secuela al 100%. Cómo también sé que es muy difícil acordarse o incluso siquiera haber jugado al antiguo título, he aquí un breve resumen: la historia nos sitúa en un futuro cercano donde la Tierra, debido a la contaminación radioactiva, se transformó en gran parte en un yermo desolado. La población quedó dividida en dos partes, la “gente bien”, que viven en ciudades cerradas y aisladas del exterior, y los “Gaplanders”, que se rebuscan la vida en el desierto y conviven en pequeñas tribus.
En el primer juego conocemos a Robert Foster, un muchacho que vivía en Union City y, tras un accidente de helicóptero, termina sin memoria en el “Gap” y es adoptado por una tribu, quienes le ponen ese nombre por el significado de Foster en inglés, que es adoptivo. Robert crece en la tribu y se vuelve un genio en programación y robótica, y crea una inteligencia artificial llamada Joey, que puede almacenarse en un chip y colocarse en diferentes cuerpos. Joey y Robert se vuelven mejores amigos, pero un día un ejército enviado desde Union City destruye la tribu dónde vivían y secuestra a Robert. A partir de ese momento empieza todo el recorrido secuestro-escape del primer juego, dónde finalmente descubrimos que quien había secuestrado a Robert era su propio padre biológico, que se había fusionado con una IA en la ciudad para tener todo bajo su control pero estaba a punto de morir y necesitaba un nuevo cuerpo, es decir, el de su hijo. Tras lograr derrotar al villano, Robert vuelve al Gap para reconstruir su tribu, no sin antes dejar a su amigo Joey a cargo de Union City, como un gobernante justo y benévolo.
Algunos años más tarde llegamos a lo que nos ocupa, la historia de BEYOND. La trama comienza con el secuestro de un niño llamado Milo, hijo de un amigo de Robert, a manos de un grupo de Stalkers que de desplazan en un extraño vehículo con patas de insecto. El rastro lleva a Robert de nuevo a Union City, dónde las cosas son bastante diferentes a como eran cuando él la liberó. Para ingresar consigue hacerse pasar por un tal Graham Grundy, una persona que encontró muerta en el camino y a quién roba su identidad, y pronto descubre que aparentemente Joey ha abandonado repentina y misteriosamente su puesto y ha dejado de a cargo a un consejo de 5 personas supuestamente elegido democráticamente. Y lo que es peor, parece que éste tal Graham también era una persona muy turbia y está directamente relacionado con el secuestro de niños en el Gap. La misión ahora es tratar de descubrir el paradero de Milo usando toda la información y los accesos que el nombre de Graham le pueda abrir, además de averiguar qué es lo que pasó realmente con Joey. Ufff, me extendí más de lo que pensé.
PASAME EL MOUSE POR TODOS LADOS
Cómo les comenté en un principio, se trata de una aventura gráfica de la vieja escuela, que aprovecha las capacidades de los sistemas más modernos para brindarnos entornos totalmente en 3D y horas de diálogos, algo impensado a principios de los 90s. La jugabilidad es, en teoría, simple: movemos a Robert por los escenarios y dirigimos nuestra mirada a los objetos que puedan ser de nuestro interés. Si algún objeto o personaje a nuestro alrededor es interactuable, aparecerá un pequeño marcador sobre el mismo, y una vez que pulsemos el botón se nos abre un abanico de acciones que podemos realizar sobre el objeto o personaje destacado.
Examinar, tomar, hablar o abrir nuestro bolso de ítems para dar/usar alguno, por poner algunos ejemplos, la idea es ir avanzando poco a poco resolviendo todos los “puzzles situacionales” que se nos presentan. Charlando con otros personajes para obtener información, recogiendo y utilizando diferentes ítems o incluso utilizando una herramienta de hackeo para cambiar los protocolos de acción de robots o maquinarias, de a poquito vamos a ir develando la trama del título. Y más arriba puse que la jugabilidad era simple en teoría porque, si bien casi todo se resuelve dentro de un espacio limitado y con bastante lógica en general, hay momentos en que algunos puzzles se vuelven demasiado rebuscados y con soluciones muy tiradas de los pelos, y también hay un poco de abuso justamente en el uso de la herramienta de hackeo, que empieza siendo una opción copada y novedosa para terminar siendo algo pesado, embolante y que desafiamos no seguir haciendo.
UN CLÁSICO MODERNIZADO
Los gráficos del juego se ven muy bonitos y tienen un estilo artístico que utiliza el ya clásico cell-shading para darle al título una visual tipo cómic, bastante parecido a lo que vimos en otros juegos como la saga de Borderlands. Todos los personajes tienen diseños muy interesantes y que se ajustan a la perfección con sus personalidades, y tanto los múltiples tipos de robots que pululan por las ciudades como las ambientaciones bien diferenciadas entre los yermos áridos, desolados y llenos de muerte y las ciudades altamente tecnológicas, vivas y esencialmente perfectas está muy bien realizado. Lo único criticable en este punto es que los movimientos de los personajes a veces se vuelven raros. Al visualizarse todas las escenas con el motor gráfico del juego en tiempo real, más de una vez me pasó que Robert quedó de espaldas en el momento en que se acomodó para hablar con otro personaje y toda la escena del diálogo solo muestra su nuca o los NPCs que andan por las ciudades se me quedaron caminando constantemente encima en alguna otra escena. Pero es algo que no llega a molestar y hasta causa gracia a veces.
El audio también está muy bien. Horas y horas de diálogos, con múltiples opciones y reacciones de los personajes a las diferentes situaciones. Todas las voces han sido elegidas perfectamente de acuerdo a la forma de ser del personaje, y además hay un lipsync perfecto que es realmente digno de admirar en un juego de este estilo gráfico. Además, y como no podía ser de otra manera en un título de este género, todo el contenido es ingenioso, gracioso y las interacciones son siempre inteligentes y divertidas, así que el espíritu nostálgico de los 90s está absolutamente presente en todo momento
YO SOY TU AMIGO FIEL
Habiendo tenido la posibilidad de probar la vuelta de un clásico de mi infancia, y ver el resultado logrado, me hace pensar que sería una idea genial que el género reviva un poco al menos. Imagínense nuevas entregas de MONKEY ISLAND, INDIANA JONES, un nuevo capítulo de la saga MANIAC MANSION/DAY OF THE TENTACLE, un nuevo FULL THROTTLE, y mucho más. Imaginen que todos mantienen la jugabilidad y espíritu de hace 30 años pero que solo modernizan los aspectos técnicos. ¿No les parecería genial?.
BEYOND A STEEL SKY es un juego muy lindo. Y algo que me llamó la atención en su planteo, repleto de humor y situaciones absurdas, es que hay un mensaje entre líneas de lo que es realmente la vida y la amistad. Robert daría la vida por Joey sin dudarlo. A pesar de que Joey no es más que, literalmente, una IA en un chip que se inserta en diferentes cuerpos robóticos. Para nosotros, para él es su mejor amigo. Pero al mismo tiempo, Robert no parece considerar a cualquier otro ser robótico como alguien con vida, sino como “algo”. No le tiembla el pulso si tiene que arrancar la batería de uno de ellos para encender, por ejemplo, un camión, a pesar de que el mismo robot desarmado le diga que eso es igual a matarlo y que no quiere morir. Fuerte.
Lindo de ver y jugar, divertido, lleno de chistes y comentarios ingeniosos, y hasta momentos que te dejan pensando, BEYOND A STEEL SKY es un gran producto, sobre todo para los más grandecitos que crecieron con los juegos anteriormente mencionados. Si bien no es muy largo (la historia se puede terminar en unas 7 horas), seguramente al principio nos tome mucho más que eso, ya que hay puzzles y situaciones que nos harán realmente devanarnos los sesos en busca de una solución, la cuál más de una vez resulta mucho menos evidente y más rebuscada de lo que pensábamos. Y lo mejor es que ciertas decisiones en el camino cambian algunos aspectos de la historia, así que incluso se puede jugarlo más de una vez para ver todas las alternativas que nos ofrece el argumento.
