Giants Uprising Preview: Rompan Todo

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¿Alguna vez quisieron ser gigantes? ¿Andar por ahí pisando y rompiendo cosas aprovechando el poder destructivo de ser enormes? Suena a algo demasiado específico, ¿verdad? De la mano de VARSAV Game Studios podemos cumplir esa fantasía y, de paso, hacer todo el kilombo posible.

Giants Uprising está disponible en Early Access para PC.

PASOS DE GIGANTE

Humanos y gigantes vivían juntos en relativa armonía, cooperando entre sí. La historia explica que, a lo largo de los años, los gigantes fueron debilitándose mental y físicamente, hasta que los humanos deciden traicionarlos y esclavizarlos. Nosotros tomamos el rol de un gigante llamado Rogbar que con la ayuda de un prisionero humano, deciden escapar juntos. Viendo cómo se dan las cosas en el primer nivel, que nos sirve de tutorial, es realmente ridículo que ningún otro gigante no haya al menos intentado escapar antes.

Siendo nuestro personaje un gigante, nuestros movimientos son en su mayoría lentos, esto es intencional y le da un peso acorde a nuestras acciones. Podemos golpear con nuestros puños hacia adelante, dar un fuerte pisotón con daño en área, esquivar y bloquear. También podemos recoger objetos y revolearlos, muy útil y efectivo. Todas estas acciones cuestan energía que se representa en una clásica barra de stamina. Por algún motivo que desconozco, se siente en general una especie extraña de lag en casi todo lo que hagamos.

En nuestra aventura hacia la libertad nos vamos a enfrentar a varios peligros, los humanos no nos la van a dejar fácil. Al tener gigantes esclavos, vamos a tener que lidiar con estos. El combate contra otros gigantes se siente como una imitación de Dark Souls comprada en Wish. Luego hay hordas de soldados humanos que no son muy peligrosos y podemos caminarles por encima, pero es más fácil dar un pisotón. Los escuadrones de arqueros si representan un peligro más real, cada tanto van a tirarnos una ráfaga de flechas que debemos esquivar, ya que pasan a través de casi todos los obstáculos de formas que no deberían. También hay una cantidad absurda de torres de asedio que van a bombardearnos constantemente. Siendo estas lo más molesto con lo que tenemos que lidiar, realmente se excedieron con la cantidad. Casi todos los niveles tienen una cantidad de torres más grande de la que me gustaría. Por suerte si les tiramos con algo desde una distancia tenemos más rango que ellas, por lo que sirve jugar con cuidado.

Es fácil en medio del combate y la destrucción perder noción de cuanta vida tenemos, así que por suerte pisar hordas de humanos va a darnos un poco de recuperación. Pero para curarnos manualmente necesitamos comer carne. Ese es el item de curación de este juego, podemos llevar una cantidad muy limitada, y lo divertido es cómo obtenerla. Vemos una vaca, vamos y la agarramos, listo, carne en nuestro inventario para curarnos cuando queramos. 

Los niveles son extremadamente lineales. Los objetivos son claros y siempre bien marcados, pero salvo quedarnos atrás para destruir cosas, no tenemos mucho más que hacer que no sea avanzar al siguiente objetivo. El juego no nos deja ni siquiera cruzar, por ejemplo, arroyos que no quiere (pero que nuestro gigante podría), no encontré tampoco áreas secretas ni extras. El lado bueno de esto es que no perdemos tiempo dando vueltas por ahí.

A LO GRANDE, PERO SE QUEDA CHICO

El punto fuerte del título es casi exclusivamente ser un gigante que rompe cosas. A pesar de tener muchos puntos flojos, hay que darle mérito donde se lo merece. Destruir cosas con excesiva violencia es la parte divertida, y un gran acierto. Lamentablemente, con todo lo mencionado en la sección anterior, necesita muchísimos ajustes para ser una experiencia que valga la pena.

El juego se ve muy bien incluso bajándole la calidad a los gráficos (que vienen por alguna razón al máximo por default, independientemente del hardware de tu máquina), pero no corre como me gustaría. Además de ese extraño lag que tiene hacer cualquier acción dentro del juego, tener constantes bajonazos en el framerate no ayuda. Tuve también algunos crashes, necesita realmente mucha mejor optimización. Por alguna razón los tiempos de carga son muy, pero muy largos. Incluso instalando el juego en mi disco SSD seguían siendo larguísimos.

Conclusión

Giants Uprising es un juego de destrucción masiva, divierte a pesar de sus numerosas fallas. Desde Rampage que no me divertía tanto rompiendo cosas. Sin embargo, esos momentos de diversión duran poco. El juego todavía necesita mucho trabajo para que termine siendo un buen producto. Con unos ajustes en el balance del combate, animaciones más pulidas y mejoras de performance, podría ser un mucho mejor juego a futuro.

Por lo que es en este momento, es bastante caro, recomiendo esperar a que esté más completo.



Me gustan los carbohidratos, la cafeína, los jueguitos y el aire acondicionado. Tengo todas las vacunas al día.


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