Meat Boy esta de vuelta (diez años después, ¿un poco tarde?). Super Meat Boy Forever es una secuela fuera de lo que esperaban los fans ya que transforma el plataforma clásico en un auto-runner. El desafio sigue estando pero ¿vale la pena?.
Super Meat Boy Forever llega en exclusiva a Nintendo Switch y PC (a través de Epic Games). Y pronto a PS4 y Xbox One.
Se acabo la paz para la linda familia de Meat Boy
El juego nos pone en la piel nuevamente de Meat Boy y ahora de su amada Bandage Girl. Ellos estaban muy tranquilos en un picnic con su pequeño retoño Nugget; hasta que el malvado Dr. Fetus secuestra al niño y es trabajo de la pareja rescatarlo.
La historia no pretende ser original pero cumple con ese humor acido que se refuerza con los coloridos e inocentes dibujos en el medio de tanta matanza. Vamos a ir viendo varias cinemáticas en el camino de nuestros héroes a lo largo de los niveles que visitamos. También se cuenta un poco a la par la historia de los animales del bosque que también buscan venganza contra el Dr. Fetus por destruir su hogar.
Cambios que pueden no agradar
Como mencionamos en la introducción de esta nota. Super Meat Boy Forever ha pasado de ser un plataformero clásico 2D a un juego auto-runner; género muy popular en dispositivos móviles (principalmente por la facilidad de jugarlos en pantallas táctiles). Este cambio obviamente que le quita interacción al jugador que ve que sus acciones son limitadas. Pero también agrega una velocidad imposible de detener.
La aventura cuenta con cuatro mundos, un quinto mundo especial que da fin a la historia principal y un sexto mundo que solo podemos acceder cuando entramos a ciertos portales, warp zones o glitches que hay en los escenarios. Cada mundo tiene varios niveles que tienen algunas variables según una semilla que elegimos al principio. También cuando superamos los tiempos impuestos por la IA accedemos a los mismos niveles pero en el «mundo oscuro».
Al principio solo podremos acceder a dos personajes pero si cumplimos ciertas acciones podremos destrabarlos a todos. No hay diferencia en sus mecánicas pero si en sus animaciones.
Como el juego es un auto-runner y nuestros personajes corren solo, lo único que tendremos que hacer es saltar, hacer un slide o un puñetazo en el aire para impulsarnos o acabar con enemigos. La mecánica al principio puede parecer frustrante, después de un tiempo sigue siéndolo. Aunque después de morir cientos de veces le agarramos la mano. Por suerte hay pequeños puntos de guardado que nos facilitan avanzar.
Los primeros niveles son bastante sencillos, las cosas se comienzan a complicar con los jefes finales y luego en los niveles más avanzados. La precisión de los saltos y golpes (como a su vez la memoria) son la base fundamental para terminar el juego. Y tener paciencia claro, si sufren de ansiedad olvídense de jugar Super Meat Boy Forever. El jefe final del nivel 5 es más que un desafío, pero como la acción es rápida y sin detenerse una vez que morimos estamos deseosos de volver a intentarlo.
Marcando nuestro camino de rojo o rosa
El salto gráfico de el primer Super Meat Boy (2010) a este Super Meat Boy Forever (2020) no es tan grande. Tampoco era necesario, los cambios son sutiles en las animaciones, en los enemigos y principalmente en los jefes finales.
Las cutscenes son muy divertidas ya que como todo el juego en general, presentan una serie de colores y personajes casi sacados de una fábula infantil pero en un contexto de humor negro para adultos.
La música es un buen acompañante, me gusto bastante y no me pareció tediosa o en algún momento la sentí repetitiva (teniendo en cuenta que la escuchamos mil veces cuando morimos). No hay muchos efectos sonoros, están pero pasan desapercibidos.
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REQUISITOS DEL SISTEMA
MÍNIMO: SO: Windows 7 – Procesador: Core i3 or AMD equivalent – Memoria: 2 GB de RAM – DirectX: Versión 10
Almacenamiento: 1 GB de espacio disponible
Conclusión
Super Meat Boy Forever tiene un cambio radical en su construcción jugable. Esto no lo hace un mal juego, lo hace más directo. No es simple la palabra, porque el desafío sigue siendo muy alto (MUY ALTO).
Por momentos se siente más como una adaptación del juego original a móviles o un Super Meat Boy 1.5. Es lejos de ser un plataformas innovador como lo fue su primera parte.
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